lunes, 7 de agosto de 2017

UNA BÚSQUEDA DESESPERADA (EPISODIO #382)


El extraño ser extendía un brazo. Tenía cuatro dedos y eran muy largos. Me estaba invitando a tenderle la mano. Yo estaba pasmado, pero me tranquilizaba saber que no quería hacerme daño. «¿Y si es un engaño?», titubeaba en la encrucijada con la piedra en la mano. El gato ronroneaba y me animaba a saludarlo.